24 de octubre de 2013

Proceso habitual de Lavado.

El proceso habitual de lavado se compone de 5 pasos:


1. Aclarado inicial de la superficie:

El aclarado inicial tiene como finalidad arrastrar las partículas de suciedad de mayor tamaño que son las que mas daño pueden hacer en el paso del lavado, así como las partículas mas adheridas (barro, excrementos de pájaros, etc), así como ablandar el resto de suciedad para facilitar su posterior retirada.

Este proceso consiste simplemente en rociar toda la superficie con agua, empezando por el techo y hacia abajo de manera que por gravedad el agua arrastre las partículas mas grandes. En caso de hacerlo con agua a presión, aunque es mas recomendable también, debemos tener mas cuidado de situar la lanza a una distancia lo suficientemente segura para evitar que el agua a presión arrastre con excesiva fuerza estos residuos sobre la pintura, ya que se podrían producir arañazos. Dependiendo de la presión del agua, una distancia de entre 50 cm y 1 metro es mas que suficiente.


2. Prelavado:
 
El paso del prelavado es opcional, sólo es recomendable si el coche está extremadamente sucio o queremos quitarle el tratamiento que lleva (ceras, sellantes, glazes, cualquier tratamiento de protección o acabado aplicado sobre la carrocería). 

Es un proceso que raramente necesitamos. En condiciones normales, el remojado o aclarado inicial eliminará la suciedad no adherida a la pintura, por lo que este paso es ocasional.

Su función es la de ablandar e incluso despegar la suciedad mas dura o adherida, de manera que reduciremos el peligro de crear arañazos en la fase de lavado. 

Para realizar esta tarea se pueden utilizar herramientas como la Tornador, Foam Gun o Foam Lance (presión aportada por una máquina de agua a presión) y algún champú espumante (para prelavado normal) o bien 1Z Car Star diluido (para eliminación del tratamiento anterior), por ejemplo. Crean un chorro de espuma muy densa y que permanece durante mucho tiempo sobre la superficie sin disiparse.
Como siempre debemos tener cuidado con los tiempos de aplicación para evitar que el champú se seque sobre la carrocería.


3. Lavado:

Para el lavado usaremos el método de los dos cubos, que como su propio nombre indica consiste en la utilización de dos cubos, uno con agua limpia y otro donde habremos diluido el champú en las cantidades indicadas por el fabricante.

Cabe destacar en este punto que una mayor concentración de champú no equivale a una mayor limpieza, sino que puede incluso resultar contraproducente.

El proceso consiste en empapar el guante en el cubo de agua con champú, limpiar una parte de la superficie y posteriormente aclarar el guante en el cubo de agua limpia antes de volver a introducirlo en el cubo con champú.

De esta manera nos aseguraremos de que el guante no acumula demasiada suciedad, y que esta permanece en el cubo de agua sola, evitando que cuando posemos el guante sobre la pintura, lo hagamos arrastrando partículas de zonas anteriores de manera que minimizamos la posibilidad de crear arañazos. 

En cuanto a la elección del guante, es una mera cuestión de gustos. En este aspecto podemos destacar los guantes de lana de cordero, que se caracterizan por absorber una gran cantidad de agua y capturar las partículas de suciedad hacia su interior apartándola de la pintura y los guantes de microfibras, también muy suaves con la pintura y muy manejables.

En todo caso debemos desechar el uso de esponjas y bayetas, ya que lo único que conseguiremos con las mismas es arrastrar la suciedad sobre la pintura creando arañazos. 

Para la secuencia de lavado, tendremos en cuenta que siempre debemos empezar de arriba a abajo y de las partes mas sucias a las mas limpias. De esta manera evitaremos que la suciedad que desprendamos de las partes superiores se deposite sobre zonas que ya hayamos lavado y el champú ira cayendo por gravedad a zonas mas bajas ofreciéndonos una correcta lubricación en todo momento.

Así que generalmente empezaremos por el techo, y posteriormente iremos bajando por los cristales, capo, laterales, dejando bajos y defensas para el final. también podemos elegir entre ir haciendo pieza por pieza (techo, puertas, aletas...) o bien comenzar por el techo e ir dando vueltas alrededor del coche (techo, cristales, capo, puertas....). 

Las ruedas deben lavarse con anterioridad al resto del vehículo.

Los movimientos a la hora de realizar el lavado deben ser rectos, evitando movimientos circulares que pueden producir arañazos, y en la medida de lo posible en la dirección del aire, es decir, partiendo de la parte delantera para terminar en la trasera, aunque esto es más una cuestión de gustos.

En todo caso la presión que realicemos debe ser mínima, apenas el peso de la mano sobre la superficie, para evitar la creación de arañazos, y recordar aclarar el guante y volverlo a empapar en agua con champú cada poco tiempo, para asegurarnos de tener la lubricacion adecuada durante todo el proceso.

Aunque los bajos y defensas, al igual que el parabrisas, son las zonas que mas suciedad tienden a acumular. El proceso habitual es dejarlas para el final para evitar que el agua en los cubos acumule toda la suciedad de las mismas nada mas comenzar el proceso. Una solucion para esto es realizar por separado el lavado de estas partes, lavando y aclarando las mismas, y afrontar el resto de la carroceria como un lavado diferente, renovando el agua de los cubos.


-Eliminación de insectos.

Los insectos son un continuo dolor de cabeza para los conductores. Es un caso complicado porque nunca sabemos si hemos retirado completamente los restos de insectos o bien nos ha marcado la laca, y por mucho que frotemos pues no sale. 

En el caso de que se tengan muchos insectos en la parte frontal, tambien es una buena idea realizar a parte un lavado con un limpiador especifico para insectos (como el 1Z Anti-Insekt) antes de acometer la tarea de lavado completa.


4. Aclarado:

En caso de que hayamos decidido realizar el lavado pieza por pieza (esta tecnica es recomendable especialemte cuando la temperatura ambiente es alta para evitar que se seque el champu sobre la pintura) aclararemos a medida que vayamos limpiando cada una de las piezas. 

Si hemos realizado la limpieza completa, aclararemos una vez terminado, en cualquier caso la tecnica es similar. Simplemente seguiremos la misma secuencia que en el lavado, asegurandonos de retirar todos los restos de champu ya que una vez secos pueden dejar marcas permanentes en la pintura, comenzando por el techo y bajando.
 
Otra tecnica de aclarado es la del hilo de agua, la cual consiste en usar una manguera, sin ningun tipo de difusor ni reductor, y con un caudal moderado, suficiente para sea uniforme sin salpicar, ir pasando por toda la superficie lentamente, como siempre comenzando por el techo y de arriba hacia abajo, de manera que el chorro de agua vaya arrastrando los restos de champu.

Esta técnica de aclarado tambien puede llegar a considerarse como una tecnica auxiliar de secado ya que en superficies que hayan sido tratadas con cera o sellante se puede llegar a eliminar el 90% del agua de la superficie. 


5. Secado: 

Un error muy común, y que puede arruinar el proceso de lavado en este punto, es el de dejar secar el coche al aire, o hacerlo circulando. Una superficie húmeda actua como un iman para el polvo y los contaminantes del ambiente, que quedaran atrapados en las moleculas de agua y pueden dejar marcas permanentes, pudiendo incluso penetrar en las capas exteriores de la pintura. Este efecto se ve agravado si el aclarado no ha sido correcto o en zonas donde el agua tiene gran cantidad de cal. Es muy típico ver coches con marcas de cal incrustadas en la pintura debido a que se dejó secar al sol.

El secado se realiza mediante el uso de toallas de Micro Fibra preferentemente, de las denominadas Waffle Weave, con lo que nos aseguraremos de retirar todo el agua sin dejar rastros ni pelusas. 

El uso de toallas domesticas, bayetas u otros accesorios esta desaconsejado por la posibilidad de producir arañazos.

Antes de pasar al secado con toallas Waffle Weave es posible usar accesorios como la Water Blade, aunque hay que usarlas con extremo cuidado, ya que puede arañar. Es una herramienta que nos podrá recordar a los lamelunas de los cristaleros.

Su uso consiste en posar el filo sobre la superficie e, sin realizar ningun tipo de presión, ir pasando por la superficie con movimientos rectos, de manera que arrastraremos la mayor parte del agua con la herramienta. 

Para el secado de superficies con la toalla Waffle Weave, podemos usar dos tecnicas distintas: Arrastre y Posado:

-La Técnica de Arrastre

Consiste en extender la toalla completamente sobre la superficie, empezando por el techo y tirar de las puntas de la misma hacia el morro del coche, sin realizar ningún tipo de presión. Después repetir desde el techo hacia la parte trasera.

Para los laterales, algunas toallas pueden disponer de unos bolsillos donde meter las manos de manera que podamos trabajar cómodamente sin peligro de que se caiga. La presión que debemos realizar es la mínima para que la toalla permanezca en contacto con la superficie.

-La Técnica del Posado:

Situaremos la toalla sobre la superficie y presionaremos en toda su extensión con la palma de la mano, de manera que sera el efecto absorbente de la toalla el que se encargue de retirar el agua. De esta manera nos aseguraremos de realizar el proceso de secado sin ningún tipo de fricción.

En el Capítulo de Lavado y Secado del Automóvil, perteneciente al Videomanual de Forodetalles (en YouTube), podemos observar todos estos pasos a seguir.